Oraciones por la Tierra

Celebramos el Día de la Tierra y todos los días con estas oraciones, ofrecidas por los ministros de Unity y otras personas que aman y aprecian nuestro hogar. Con estas oraciones, nos comprometemos a amar nuestro planeta y a todos sus seres.

Una bendición por la Tierra

Oro y bendigo a nuestro hermoso planeta azul.
Bendigo a la Tierra por su espíritu generoso y dadivoso.
Estoy agradecido por toda la riqueza y diversidad de nuestro mundo, por el agua limpia y los alimentos que nutren y sostienen nuestros cuerpos.
Oro para siempre caminar en reverencia y honrar toda vida.

—Rev. Elizabeth Longo

Una oración por todos los seres vivos

Al honrar y reconocer a nuestra Madre Tierra, también bendecimos a sus criaturas, a los que vuelan, los que nadan, los cuadrúpedos, los bípedos, los rastreros y a los que viven dentro de la tierra, incluso a nuestros hermanos y hermanas, las plantas y las rocas.

Oro para que todas nuestras vidas estén llenas de amor y experimenten la paz.

—Rev. Dale Worley

Oración de nuestra Madre Tierra

Madre nuestra, cuyo nombre es Tierra,
Santificado sea tu suelo.
Alabada seas por tus tierras,
tus cielos y,
tus mares ondulantes.

Tus jardines prosperan; tu espíritu vive
a través de bosques y arroyos,
montañas y llanuras por doquier.

Danos hoy lo que necesitamos para mañana
y refréscanos con tus aguas vivas.

Perdona nuestros malos tratos
así como perdonamos a los que te maltratan.

Líbranos de la negligencia y libéranos de la codicia,
porque tuyo es el hogar, y la belleza,
y la vida que nos sustenta,
te amaremos, respetaremos y cuidaremos
ahora y siempre, por siempre.

—R. Dennis Wiancko

Elogio a los árboles

Hago una oración por los árboles,
por la corteza de los árboles,
las hojas de los árboles,
las raíces de los árboles,
la tierra bajo los árboles,
y el agua que nutre a los árboles.
Doy gracias a nuestro Creador y pronuncio una oración por las aves,
por aquellas que se refugian en la copa de los árboles.
Doy gracias a la Única Presencia, que todo lo da.
Doy gracias al Altísimo por los árboles, por siempre y para siempre.

—Rev. Lulu Logan

Deleitarse en la Vida Divina

Me maravillo al estar bajo una noche sin luna y sin nubes en el desierto, con el corazón abierto como el cielo infinito y colmado de estrellas.

Me deleito al caminar entre la arena y el mar, respirar el aire salado y reír con el graznido de las gaviotas.

Me detengo en la cima de la montaña y me uno a los árboles mientras extienden sus ramas hacia el cielo; entonces levanto mis manos en alabanza.

Canto al amanecer, agradezco por estos recuerdos de vida divina, de bien absoluto y amor incondicional. Desde la unicidad, bendigo esta expresión perfecta de plenitud, belleza y sostenibilidad que es la Tierra.

—Rev. Todd Humphrey

Amor a la Madre Tierra

Madre Tierra, Gaia, reflejo de la belleza, nos llenas de alegría, asombro y admiración. Estamos agradecidos de vivir esta encarnación humana en tal esplendor. Seamos conscientes de los dones de la Tierra y sabios administradores, discerniendo cómo cuidarla y preservando todo lo que es bueno. Mostremos compasión por todos los seres vivos y honremos a los seres no vivos. Recordemos nuestra unicidad.

—Rev. Carolyn Warnemuende

El Espíritu de Vida

El Espíritu de Vida que se manifiesta a través de mi cuerpo también se manifiesta a través de la Tierra.

Nuestros cuerpos son cuerpos celestes. Las partículas de las estrellas brillan en mis huesos.

El océano corre por mis células y fluye en mi interior, mezclándose con los minerales de la tierra.

Respiro el aliento de las hojas y me alimento de la luz del sol que captan.

Estoy inseparablemente interconectado con las expresiones de la vida en este mundo.

El viento es mi aliento y me muevo al compás de los ciclos rítmicos orquestados por nuestra órbita a través del espacio.

Confío en el orden divino perfeccionado a través de millones de años y sé que estoy sostenido por el abrazo eterno de la vida.

—Malayna Dawn

Una oración por el perdón

Gracias, Madre Tierra, por todo lo que nos has brindado. Has albergado vida durante millones de años. Nos hemos alimentado de tus granos y disfrutado de tus verdes pastos bajo la sombra de imponentes árboles. Nos hemos emocionado con tus majestuosos picos montañosos y profundos valles tallados por ríos caudalosos. Nos has otorgado soberanía sobre las plantas, los animales y las selvas tropicales.

Pedimos ahora tu perdón por el daño que hemos infligido a tu alma, y oramos por la fortaleza y el valor para enmendar nuestros caminos y restaurarte a tu asombroso esplendor. Nuestra oración en este día es respetarte y honrarte y, de esta manera, también nosotros seremos restaurados a nuestra vida natural amorosa y plenamente espiritual.

Reconocemos y pedimos que el Gran Espíritu que reside dentro de nosotros nos guíe y nos dirija en nuestros esfuerzos por vivir como una sola vida, un solo corazón, un solo espíritu.

—Rev. John Beerman

El punto azul

La Tierra es nuestro magnífico hogar que sustenta toda vida, un pequeño punto azul en el vasto universo. Mi corazón está lleno de amor, bondad, compasión y cuidado mientras oro por la armonía, la sanación y la paz a través del corazón palpitante de la Madre Tierra.

—Rev. Margo Ford

Ver la belleza

Hoy, me comprometo a ver la belleza de toda la creación.
Veo las lluvias suaves que caen y nutren la tierra.
Veo las diminutas criaturas que vuelan de flor en flor, fecundando plantas que dan frutos y semillas.
Veo las aguas que fluyen, refrescan y restauran todo en la vida.
Veo a los seres de tierra y mar que juntos crean un maravilloso paisaje de equilibrio, armonía y sagrada comunión.
¡Que mis ojos y mi corazón nunca se vuelvan ciegos a tu gloria!
¡Que mis acciones nunca menoscaben tu obra!

—Rev. David B. Adams

La Tierra nos cobija

Sosiego mi mente y abro mi corazón para observar las maravillas de la naturaleza, y entonces fluye en mí un profundo sentimiento de gratitud.

Valoro y bendigo el aire puro que respiro, la vegetación colorida que me rodea, el sonido del ancho mar y cada uno de los regalos que nos ofrece nuestro planeta.

Doy gracias por la generosidad y el amor con que nuestra Tierra nos cobija y nos bendice momento a momento.

—Rev. Beatriz E. Gallerano Bell

Uno con la Naturaleza

El regalo de la vida nos ha colocado en este planeta increíblemente hermoso.
¿Sabemos que estamos caminando sobre suelo sagrado, respirando el aliento de lo Divino y bebiendo de las aguas benditas del Espíritu?
¿Experimentamos esta conexión divina con toda la creación?
¿Sentimos la presencia sanadora de los bosques y las arboledas sagradas de secuoyas?
¿Sentimos el poder del océano?
¿Vemos la divinidad en todos los animales, incluidos nosotros?
El ego nos dice que estamos separados de la naturaleza. El Espíritu nos dice que somos uno.
¿En qué se basan nuestras creencias y acciones?

—Rev. Margaret Flick

Al caminar por la Tierra

Es una bendición trascendental darme cuenta y recordar que soy uno con la Tierra. Celebro mi conexión con ella mientras transito los caminos que ha dispuesto para mí.

La sinfonía de la naturaleza me rodea en cada paso, mientras que las melodías se elevan en el cielo gracias al canto de los pájaros.

A veces el viento me acaricia con suaves brisas y otras veces con ráfagas esperanzadoras que me animan a seguir adelante.

Prometo ser un socio responsable y protector de este mi hogar, mi lugar de conexión, porque estoy verdaderamente agradecido.

—Rev. Alberta Ware

Encontrando Soluciones

Respiro profundamente y me sumerjo en el corazón mismo de la oración.

Siento que las divisiones desaparecen y que todas las personas se unen para sanar nuestro planeta mediante soluciones prácticas, innovadoras y fáciles de implementar y financiar; estas soluciones son eficaces y rápidas para revitalizar, reparar y restaurar el equilibrio de la Tierra. Aceptadas con entusiasmo se vuelven efectivas de manera inmediata.

Ahora surge un nuevo paradigma. La humanidad armoniza con la naturaleza, creando un futuro sostenible en un planeta próspero que beneficia a todos.

—Trish Yancey

Un poema para la Tierra

Trabajar juntos

Afirmo que la progresión perfecta del planeta Tierra y todos sus habitantes se está desarrollando ahora.

Revélanos, Dios, cómo trabajar juntos para protegernos, cuidarnos, respetarnos y honrarnos unos a otros y a nuestro hogar. Permítenos descubrir cada día los elementos que sustentan la vida de esta Tierra que sanan y restauran. Inspíranos a vivir en armonía con la naturaleza.

Estamos agradecidos, Dios, por la belleza, la paz y el orden divino que experimentamos a medida que avanzamos en nuestro día. Todo está siempre bien.

—Shakira Taylor

Respetar la Tierra

Bendigo toda vida en honor de nuestra unidad planetaria.
Bendigo el cielo, el mar y la tierra en los que moramos, recordando nuestra unicidad.
Oro por un mundo en que toda vida coexista en armonía y compasión.
Respeto cada expresión de vida consciente de que la divinidad es la fuente de toda existencia.
Amo nuestro planeta porque nos brinda los alimentos que nos sustentan.

—Rev. Jeanmarie Eck

Aceptar la Unicidad

Bendita amada Tierra, te agradezco por formar parte de esta hermosa extensión de la Creación, por sustentarme con tu riqueza y belleza. Afirmo que la humanidad desarrolle una conciencia colectiva de respeto y tome acciones de restauración para establecer una armoniosa relación con el suelo, el agua, el aire y todos los seres vivos que comparten este planeta.

Acepto la unicidad, sabiendo que como ser humano no estoy separado del resto de la naturaleza, sino que soy parte de ella. Con profunda gratitud me inclino ante la magnificencia y el esplendor de la Tierra, nuestro hogar maravilloso.

—Cylvia Hayes

Gratitud por la Tierra de Dios

Agradezco por la vasta y universal Tierra de Dios en la que vivimos y existimos en Él.

Agradezco por el suelo que alimenta las semillas, y nos permite recoger la cosecha y sustentar la vida de todas las criaturas.

Agradezco por el cielo hermoso que ilumina y embellece nuestro camino gracias al sol, la luna y las estrellas.

Agradezco por las gloriosas e indescriptibles aguas del mundo, vitales para nuestra supervivencia, refrescantes, purificadoras y agradables.

Agradezco y protejo este planeta que rodea a Dios.

Agradezco por la unidad ilimitada del Espíritu que nos une en paz y amor.

Todos somos uno.

—Marilyn King-Compton