Una oración por los niños: Dejar ir

Todo cambio implica dejar ir

Al igual que las estaciones, el cambio ocurre constantemente en nuestras vidas. Experimentamos una variedad de cambios de diversas formas. El día se transforma en noche, el verano da paso al otoño y el curso escolar comienza y termina. Estos son algunos de los cambios recurrentes que percibimos al sentir su ritmo natural.

También enfrentamos cambios menos frecuentes que pueden sorprendernos o tomarnos desprevenidos. Por ejemplo, un amigo se muda repentinamente o nos vemos obligados a cambiar de escuela. Tal vez perdemos una mascota o un ser querido hace su transición. Aunque estos cambios no siempre son planificados, son una parte natural de la vida. El cambio trae consigo nuevas experiencias, oportunidades y la posibilidad de crecimiento. Pero también nos desafía a dejar ir.

Dejar ir puede resultar difícil, especialmente cuando sentimos que no tenemos elección. Sin embargo, en esos momentos, tenemos la oportunidad de permitir que Dios nos guíe. Es normal experimentar tristeza o enojo, pero podemos recordar que todo sucede para nuestro mayor bien. Esta es una enseñanza fundamental en Unity: aunque no siempre lo percibamos externamente, el amor y el apoyo de Dios siempre están presentes dentro de nosotros.

Dejar ir puede ser un proceso que lleva tiempo. Es importante que nos tratemos a nosotros mismos con amabilidad y compasión. A continuación, presento algunas actividades familiares que puedes realizar para honrar este proceso:

• Escribe una carta de agradecimiento y amor dirigida a la persona, mascota o lugar que estás dejando ir.
• Deja una oración o una bendición como bienvenida para los nuevos residentes y exprésales tus mejores deseos, especialmente si te estás mudando de casa.
• Organiza una ceremonia en la que puedas escribir en papel las cosas que estás dispuesto a soltar, y luego quema esos papeles en una hoguera (asegurándote de que sea segura y supervisada).
• ¡Diviértete soplando burbujas! Visualiza a la persona, lugar o cosa de la cual estás separándote dentro de una burbuja y sopla hacia el cielo. Observa cómo se aleja flotando, simbolizando todo lo que estás dejando ir.

Cuando la vida nos pide que dejemos ir, recordemos que Dios está presente en todas las cosas y en todas partes. Nos tomamos un momento para aquietarnos y sentir cualquier sentimiento de pérdida o incertidumbre que surja, sabiendo que esos sentimientos son naturales. A medida que los dejamos ir, oramos afirmándonos en que Dios está presente y nos guía hacia nuestro mayor bien.

Una oración para que todos los niños puedan dejar ir

Sabemos que la presencia de Dios está siempre con nosotros y dentro de nosotros. Estamos agradecidos por el regalo de tener a (nombre de la persona, mascota, lugar, etc.) en nuestras vidas. Aunque los dejamos ir, sabemos que los extrañaremos y está bien sentirlo. Ahora los confiamos al cuidado y protección de la Divinidad, deseando solo cosas buenas tanto para ellos como para nosotros.

Oración familiar para dejar ir

Juntos hemos amado a (nombre de la persona, mascota, lugar, etc.) y las bendiciones que trajeron a nuestras vidas. Ahora los dejamos ir, confiando en que están cuidados ahora y siempre. Estamos emocionados por las nuevas oportunidades que llegarán a nuestras vidas.

Juntos afirmamos:

Todos los niños son bienvenidos a orar con los asociados del Ministerio de Oración de Unity.